1: Relleno; 2: Con tomate; 3: Con sangrecilla (foto M. Sarobe)

En el mes de abril se celebra el «Capítulo» anual de la Cofradía del Relleno de Navarra, de la que soy cofrade de honor. La sede está en Villava-Atarrabia. Desde 2004  –fecha de su inscripción oficial– acuden a la convocatoria de cada «Capítulo» diversas cofradías gastronómicas, autoridades y público vecinal, formando una bulliciosa y pintoresca comitiva.

El relleno es un embutido que pertenece a la zona de la Cuenca de Pamplona, aunque también se disfruta en otras comarcas navarras. Se trata de una morcilla blanca o morcilla rubia, ya que en lugar de sangre lleva huevos, arroz cocido, tocino de cerdo, cebollas, ajos, perejil y azafrán, que es el ingrediente que le confiere el color amarillo. Está embutido en tripa natural o artificial y su sabor es suave con ligeros matices propios de las especias que aglutina. Es un producto ligado a las fiestas populares, pero puede adquirirse durante todo el año, siendo su temporada natural el invierno. Se comercializa en fresco y se consume frito, a veces acompañado de salsa de tomate, y también se puede utilizar para acompañar asados y verduras. Seguir leyendo